¿Por qué no seguí al conejo blanco? Ahora estoy acá atascada en el mero aburrimiento, escuchando las gastadas historias de mi hermana, rasgando el agrietado suelo con las uñas sucias y rotas, y buscándole alguna forma inexistente a decenas de nubes que pasan por encima mio. Imagino que hubiera pasado si lo hubiera seguido... probablemente tendría alguien -aunque sea por un momento- a quien contarle algún cuento, o por lo menos alguien con quien no aburrirme de semejante manera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario